
La artrosis de la articulación de la cadera es una enfermedad que también se presenta con el nombre de coxartrosis y suele afectar a personas mayores de los cuarenta años. Su causa es una disminución del volumen de líquido sinovial secretado en la articulación. Según las estadísticas médicas, las mujeres tienden a sufrir coxartrosis con más frecuencia que los hombres. Afecta a una o dos articulaciones de la cadera. Con esta enfermedad se altera la nutrición del tejido cartilaginoso, lo que provoca su posterior destrucción y limita la movilidad de la articulación. El síntoma principal de la enfermedad es el dolor en la ingle.
No te automediques. Ante los primeros signos de enfermedad, consulte a un médico.
Causas de la enfermedad
Los principales factores que influyen en el desarrollo de la enfermedad son:
- lesiones y microtraumatismos de la articulación de la cadera;
- exceso de peso;
- carga sobre las articulaciones debido a la naturaleza de la profesión;
- infarto (necrosis) de la articulación de la cadera, que se produce como resultado de tomar diversos medicamentos, sufrir estrés y beber alcohol en grandes cantidades;
- defecto congénito de las articulaciones de la zona pélvica;
- artritis (procesos inflamatorios en las articulaciones);
- cambios en los niveles hormonales (principalmente relacionados con la edad);
- osteoporosis (muerte del tejido óseo).
Síntomas de la enfermedad.
Los síntomas de la artrosis de la articulación de la cadera afectan no solo el área de la ingle, sino también la superficie anterior y lateral del muslo. En algunos casos, el dolor también está presente en las nalgas, extendiéndose hasta la mitad de los muslos y muy raramente hasta la rodilla. La diferencia entre esta enfermedad y las hernias de disco intervertebrales es que el dolor no llega hasta los dedos de los pies. La mayoría de las veces, se producen molestias al moverse.
En las primeras etapas, la enfermedad puede contribuir a una ligera cojera debido al dolor. Lamentablemente, estos signos no llevan a muchas personas a plantearse iniciar un tratamiento. Luego vienen las exacerbaciones que duran diferentes períodos de tiempo. Poco a poco, a los síntomas anteriores se va añadiendo una disminución de la movilidad de la pierna afectada. A veces, el paciente no puede mover la extremidad hacia un lado o tirarla hacia el pecho. También en esta etapa se agrega el crujido de la pierna adolorida durante el movimiento. Es necesario distinguir el crujido habitual y resonante de las articulaciones en una persona sana del crujido sordo y "seco" de la artrosis, que es causado por una mayor fricción de las articulaciones entre sí y la proliferación de osteofitos.
La artrosis deformante de la articulación de la cadera puede provocar un acortamiento de la pierna afectada (en el 10% de los pacientes, la pierna, por el contrario, se alarga). Esta deformidad es especialmente notable si el paciente se acuesta boca arriba, porque esto ayuda a rotar la pierna afectada hacia afuera. Las deformaciones importantes se notan visualmente y requieren la colocación de plantillas adicionales en los zapatos. El paciente comienza a cojear notablemente al caminar, por lo que la columna se verá sometida a grandes cargas en la región lumbar. Posteriormente se produce atrofia muscular.
Grados de coxartrosis
Hay tres etapas de desarrollo de esta enfermedad:
- Etapa 1. Con él, el dolor aparece sólo después de un esfuerzo físico intenso, aparece sólo en la zona pélvica y rara vez llega a la articulación de la cadera o la rodilla. Durante el reposo, el dolor desaparece y no aparecen otros síntomas (no se altera la libertad de movimiento, no se observa debilitamiento de los músculos). La enfermedad afecta los huesos que se encuentran cerca de la articulación y favorece su crecimiento. En una radiografía se puede ver un estrechamiento desigual de las articulaciones enfermas. En este caso, el paciente no nota una limitación notable en la movilidad de las piernas. En esta fase, la enfermedad se cura más fácilmente con la ayuda de medicamentos, fisioterapia y fisioterapia, pero pocas personas con los síntomas anteriores acuden a un especialista;
- Etapa 2. La osteoartritis de la articulación de la cadera de segundo grado se puede ver en una radiografía mediante un signo característico: crecimientos óseos significativos que van más allá del cartílago. La cabeza del fémur también cambia, deformándose en su contorno. Puede aparecer un quiste. Ahora aparecen sensaciones dolorosas en el paciente incluso en estado de reposo. También se pierde la fuerza de los músculos responsables de la extensión y se altera la capacidad de rotar la cadera;
- Etapa 3. El dolor continúa constantemente y la persona no puede caminar sin ayudas (bastones). La extremidad afectada también se acorta y los músculos se atrofian. En este caso, el espacio articular puede desaparecer por completo, lo que provocará la fusión de las articulaciones en una única estructura ósea que quedará inmóvil.
Métodos de tratamiento
Hay varias formas de combatir la enfermedad:
- medicamentos;
- complejo de fisioterapia (complejo de fisioterapia);
- fisioterapia;
- intervención quirúrgica;
- medicina tradicional.
Si la enfermedad ha alcanzado la etapa 3, lo único que ayudará al paciente es la intervención quirúrgica (endoprótesis), que consiste en reemplazar la articulación enferma con una prótesis. Este es un procedimiento bastante complejo que requiere la implantación de una prótesis. Sólo entonces realizará las funciones necesarias.
Si la patología se encuentra en las etapas 1 o 2, el tratamiento de la artrosis de cadera se puede realizar con la ayuda de medicamentos. Estos incluyen los siguientes medicamentos:
- no esteroides. Ayudarán a eliminar el dolor, aliviar la hinchazón y la inflamación, pero su uso incontrolado ayudará a suprimir la capacidad natural del cartílago para recuperarse. Los médicos no recomiendan utilizar más de un fármaco no esteroideo a la vez;
- vasos dilatadores. Son capaces de relajar los músculos lisos y aumentar el espacio entre los músculos. Tienen un mínimo de contraindicaciones, pero su eficacia es un indicador individual;
- músculos relajantes. Alivia los espasmos musculares, aumenta el suministro de sangre a las articulaciones, pero su uso debe realizarse bajo supervisión médica debido a los efectos secundarios;
- restaurar el cartílago. Los condroprotectores son los más útiles para curar la artrosis deformante. Nutren el cartílago con los elementos necesarios y detienen el desarrollo de la enfermedad;
- tipo esteroide. Ayudan con enfermedades concomitantes como la inflamación del hueso de la cadera, pero tienen muchos efectos secundarios;
- uso local (ungüentos, compresas). El principal efecto positivo radica en el proceso de frotar los productos sobre la piel, lo que alivia los espasmos musculares y mejora la circulación sanguínea.
Fisioterapia para la artrosis.
¿Cómo tratar la artrosis de la articulación de la cadera mediante métodos fisioterapéuticos? Vale la pena utilizar UHF, terapia de ultrasonido, inductotermia, láseres y fototerapia. Los procedimientos terapéuticos ayudan a mejorar la circulación sanguínea y alivian los espasmos musculares, por lo que son ideales para la prevención, pero afectan a cada persona individualmente. Algunos fisioterapeutas creen que uno de los mejores tratamientos es el masaje.
El tratamiento de la artrosis de cadera mediante tracción articular también es uno de los tratamientos más eficaces. Se puede realizar mediante un aparato de tracción o manualmente. El primer método ayuda a calcular correctamente la tracción en milímetros, teniendo en cuenta el estado del paciente. El segundo método es en parte popular y más laborioso, porque requiere la máxima concentración por parte del terapeuta.
Dieta
La dieta para la artrosis de la articulación de la cadera es una excelente prevención, pero no se ha demostrado el alcance exacto de su influencia en el proceso de tratamiento. Las principales reglas de nutrición son comer alimentos ricos en vitaminas A, B, C, E, ya que ayudan a restaurar el cartílago. Se recomienda incluir en la dieta productos lácteos, a excepción de la leche, y excluir de la dieta los productos elaborados con harina blanca (maíz, trigo). Conviene consumir productos cárnicos con moderación, así como aumentar el consumo de cereales en la dieta (cebada, avena, trigo sarraceno, arroz integral). La nutrición durante la enfermedad también requiere limitar la ingesta de sal. Esto tiene un efecto secundario sobre la recuperación, pero es una excelente prevención del desarrollo y aparición de la enfermedad.
Gimnasia
La gimnasia para la artrosis de la articulación de la cadera provoca un animado debate entre los especialistas, pero todos los médicos coinciden en que los ejercicios para combatir y prevenir la coxartrosis deben realizarse con cuidado. Los movimientos durante la terapia con ejercicios deben ser suaves y no causar dolor. La terapia con ejercicios para el tratamiento de una enfermedad debe tener como objetivo principalmente fortalecer los músculos y no cargar las articulaciones. Una buena forma de prevenir la coxartrosis es nadar, especialmente en agua salada.
La gimnasia para la artrosis de la articulación de la cadera incluye los siguientes ejercicios:
- Posición inicial: acuéstese en el suelo, estire brazos y piernas a lo largo del cuerpo. Levante lentamente la pierna adolorida, estirada a la altura de la articulación de la rodilla, a 15 cm del suelo y manténgala así durante aproximadamente medio minuto. Luego de esto, baja la pierna y repite el ejercicio con la otra pierna;
- Posición inicial: acuéstese boca abajo, estire las piernas y los brazos a lo largo del cuerpo. Levante las piernas rectas 15 cm, júntelas y luego sepárelas. Todo debe hacerse lentamente. La fisioterapia es un método eficaz para tratar la artrosis.
El paciente debe recordar que algunos ejercicios para la artrosis de la articulación de la cadera derivados de la fisioterapia pueden resultarle difíciles debido a su forma física. Son métodos bastante eficaces para prevenir diversas dolencias, por lo que se incluyen en el sistema de fisioterapia tanto para la artrosis como para otras enfermedades.
medicina tradicional
Entre los métodos tradicionales de tratamiento y prevención de la enfermedad se encuentran:
- aplicar hojas de col untadas con miel en la zona dolorida;
- Mezcle yodo con bilis, glicerina, miel, amoníaco y aplíquelo en forma de compresa.
La medicina no fomenta mucho estos métodos populares, pero numerosas críticas positivas en Internet hacen que el tratamiento con remedios caseros sea muy popular entre la gente.


























